El Ayuntamiento de Cabra mantendrá la política de congelación de todos los impuestos municipales en el año 2019 y seguirá aplicando bonificaciones a los ciudadanos egabrenses.
Todo ello, matizaba el alcalde en una rueda de prensa en la sede popular, “siempre y cuando no se ponga en peligro el equilibrio de la situación financiera del Ayuntamiento”. En el año 2013, el Consistorio Municipal saneó y estabilizó la economía municipal y desde entonces ha persistido en la negativa de subir los impuestos. “En 2013 fue la primera congelación, en 2014 bajaron todos los impuestos de carácter general un 5 por ciento, en 2015 un 0,4 por ciento, en 2016 quedaron congelados y en 2017 se aplicó el 1 por ciento”.
Adelantaba Fernando Priego que este año las plusvalías en caso de herencia van a volver a bajar un 0,25 por ciento, que sumado al del año anterior, supone una reducción del 0,5 por ciento, “con la intención de que dentro de dos años ya no se pague por las herencias”, y recordaba al Partido Socialista, tras la propuesta de reducción en el IBI por parte del Ayuntamiento, que las familias más necesitadas en Cabra viven en pisos que son propiedad de la Junta de Andalucía y que, por tanto, deben asumir el impuesto sobre bienes inmuebles.
Elecciones autonómicas
Priego inició la rueda de prensa con un enfoque electoral, de cara a las próximas elecciones autonómicas, y sentenció que “cambiar de gobierno es sano para la democracia y el voto para la única alternativa posible al cambio en Andalucía es el Partido Popular”.
Ese fue el mensaje que el alcalde lanzó a los ciudadanos egabrenses, al que también se adhirió la portavoz del PP en Cabra y delegada de Presidencia, Cristina Jiménez, quien señalaba a la corrupción y el aburguesamiento como principal problema del Partido Socialista en estos últimos cuarenta años. “Ponemos de manifiesto que el gobierno de la Diputación de Córdoba y de la Junta de Andalucía está aburguesado y desvía el dinero. Hace unos días, el alcalde se entera de que han sido repartidos unos cursos formativos por parte de la Diputación en toda la provincia y a Cabra no le llegó ninguno. Cuando nos enviaron los criterios de adjudicación nos decían que tenían preferencia las cabeceras de comarca y cuando le pregunté a la diputada Amo qué era una cabecera de comarca no me contestó», confesaba Jiménez, también diputada provincial.
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