El Instituto Provincial de Bienestar Social (IPBS) ha puesto en marcha la campaña de uso responsable de la energía, iniciativa que se corresponde con una de las líneas del Programa de Intervención con Familias en Situación de Pobreza Energética.
Esta iniciativa nace en 2015 junto con la colaboración de la Agencia de la Energía de Córdoba. La vicepresidenta primera de la Diputación de Córdoba y vicepresidenta del IPBS, Felisa Cañete, ha destacado que esta campaña “se plantea como un conjunto de actuaciones de carácter educativo y preventivo, con un impacto a medio y largo plazo, encaminadas a un ahorro energético en el hogar, que redunda en el bienestar y el confort doméstico de una manera permanente”. “Se trata de optimizar los servicios que las familias tienen contratados a las compañías para adecuarlos a sus necesidades reales y reducir el importe que han de pagar por la factura”, ha insistido.
Tal como se planteó en la edición anterior, habrá una primera fase de formación y sensibilización social, orientada a la difusión de los contenidos de la campaña entre la población, durante la cual se realizarán talleres y charlas informativas en los pueblos de Espiel (16 de mayo), Luque (18 de mayo), Nueva Carteya (21 de mayo), Posadas (23 de mayo), Bujalance (24 de mayo), Villanueva de Córdoba (25 de mayo), Belalcázar (28 de mayo), Santaella (29 de mayo), Peñarroya (30 de mayo), Benamejí (31 de mayo) y Aguilar (1 de junio). En esta primera etapa se realizarán, además, asesoramientos personalizados con las familias.
Posteriormente se realizará una segunda fase en la que se hará un seguimiento del consumo energético en los hogares, durante ocho semanas, en los pueblos donde se van a realizar los talleres y en las distintas familias seleccionadas por los técnicos. En el año 2017 participaron un total de 26 familias y está previsto que en esta edición sean 35.
A este respecto, Cañete ha especificado que “se instalará en estos hogares un monitor de consumo eléctrico y se realizará cada 15 días un taller analizando su factura eléctrica, los distintos equipos de consumo y hábitos, y promoviendo medidas que mejoren la eficiencia energética. Al finalizar, se les entregará un informe con sus perfiles de consumo y consejos adaptados a cada familia”.
Asimismo, con el objetivo de motivar a los miembros del hogar a cambiar sus hábitos hacia un consumo más eficiente, se pone en marcha un concurso para premiar al hogar que al final de esas ocho semanas de seguimiento consiga ser más eficiente y reducir en mayor medida el consumo de electricidad.
Por su parte, la presidenta de la Agencia Provincial de la Energía, Ana Carrillo, ha insistido en que “el objetivo de esta campaña es el de concienciar y educar con un consumo responsable”. La diputada ha indicado que “en la edición anterior se sacaron importantes conclusiones, como que la mayor parte de las familias no conocían la diferencia entre comercializadora y distribuidora ni las diferentes tarifas eléctricas”.
Carrillo ha explicado que “se instaló un monitor de consumo eléctrico que les ayudó a ser conscientes del gasto energético y permitió verificar que pequeños cambios implican una reducción del gasto. Asimismo, hemos podido verificar la importancia en el consumo total del ‘stand-by’ de los equipos, y esta campaña nos ha permitido detectar el mal funcionamiento de algunos equipos que provocaban un consumo excesivo de electricidad”.
En las charlas y talleres que se impartirán en los municipios se van a abordar temas como consumos energéticos, las tarifas eléctricas y contratación del suministro, así como ayudar a entender la factura eléctrica, entre otros. Asimismo, tal como se hiciera el año pasado, los días de celebración de las charlas habrá un punto informativo para la población.
Al término del acto, Felisa Cañete ha recordado que esta Línea 2 del Programa de Pobreza Energética es un complemento a la primera línea, consistente en ayudas económicas para el pago de suministros, que “se viene ejecutando mediante transferencias a los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes y dispone de un crédito de 300.000 euros”. La tercera de las líneas se refiere a la mejora energética de las viviendas, a través de micro reformas en el hogar.