Recordar es traer a la memoria, hacer que alguien tenga presente una cosa, una imagen o un conjunto de hechos o situaciones pasados que quedan en la mente.
Los recuerdos son imágenes del pasado que se archivan en la memoria y por tanto ésta, la memoria, es la capacidad para almacenar, retener y recordar información. Es la función cerebral que gracias a la conexión entre neuronas nos permite retener experiencias pasadas. Cuando las neuronas se encuentran dispuestas en un circuito refuerzan su intensidad e inevitablemente se crean los recuerdos.
También se definen los recuerdos como una reproducción de algo anteriormente aprendido o vivido, por lo que se vinculan directamente con la experiencia.
Los recuerdos individuales, de un colectivo humano, nos dan una aproximación más cercana de la realidad que la propia historia, ya que esta suele saltarse hechos individuales para centrarse en los acontecimientos globales.
La memoria colectiva es una reconstrucción del pasado que vincula ciertos acontecimientos recordados con deseos, inclinaciones y temores del presente, es decir, con la ideología. El recuerdo colectivo se sostiene por medio de prácticas sociales, actuando la memoria como conmemoración del pasado en si mismo, en lugar de la reconstrucción de un hecho pasado.
La memoria se produce en el marco cotidiano del conversar, donde los hablantes se identifican con el pasado y lo reconstruyen a partir de la ideología. Se podra decir que los hechos pasados se rememoran y conmemoran juntos.
No está muy claro si es algo que nos pertenece o es algo que se ha ido. Porque… ¿Cuánto tiene de real? ¿Cuánto de imaginación? ¿Debe considerarse algo bueno por haber ocurrido o algo malo por haberse terminado? ¿Es un recuerdo el mejor regalo que puede dejar un momento inolvidable? ¿Es una tristeza acordarse de algo que no volverá a pasar?. Estoy casi seguro de que, como el resto, no hay una respuesta lo suficientemente convincente.
Pero todo esto ocurre cuando nos referimos a imágenes que están en nuestra memoria. Muy diferente es la situación cuando ocurre lo que utilizamos para ese recuerdo imágenes reales plasmadas en papel fotografico, que ya nuestra mente apoyada en la imagen real reconstruye una historia también real. Esto es lo que esta pasando con el proyecto CABRA EN EL RECUERDO.
Este proyecto nace hace más de un año en las redes sociales, concretamente en facebook, auspiciado por un grupo de egabrenses amantes de la fotografia que, en un momento dado, deciden rebuscar en aquellas cajas donde cada familia guardaba sus recuerdos, recuerdos impresos en papel químico, que representaban momentos y personas concretas, en un espacio definido. Imágenes que por si solas son capaces de captar nuestra atención y curiosidad preguntado por quienes son sus protagonistas, en qué lugar se ubican, a que año se refiere, qué otros elementos no visibles en la imagen, rodean a la escena grafica.
Con estas imágenes y las preguntas que nos sugieren, rememoramos a quienes, probablemente, ya no se encuentran con nosotros, en un espacio físico que ha cambiado con el paso del tiempo, en un momento social destacado por diferentes elementos, y de esta forma elaboramos y damos contenido a nuestra memoria colectiva.
Este esfuerzo colectivo se construye sobre una necesidad del presente. Tiene mucho que ver con el momento actual y, por ende también con el futuro. No es memoria porque sí, muy al contrario, ciertos olvidos pueden tener la capacidad de amputar el futuro, en cuyo caso se da la paradoja de que el opuesto al olvido no es memoria, sino justicia.
La memoria colectiva, la de todos, se va formando con la suma de memorias individuales, que se enlazan unas a otras para dar lugar a nuestra historia local, nuestra “intrahistoria”. La infancia, las fiestas, los deportes, las costumbres, las casas, las calles -las de antes y la de ahora-… son aspectos de nuestra vida cotidiana que forman nuestra identidad.
Para evitar que todo aquello se pierda, desde el proyecto CABRA en el RECUERDO se recogen fotos, documentos y sobre todo recuerdos: ¿Cómo era Cabra hace 50, 60, 70 años? ¿Cómo se empezaron a formar los barrios? ¿Quiénes eran sus gentes mas conocidas?. Todo tiene cabida en este proyecto, en constante crecimiento.
Y a la fuerza e importancia de todo lo anterior se une la inmediatez de la comunicación, la posibilidad de poner en contacto a dos personas en lugares opuestos pero con los mismos intereses, los mismos deseos, las mismas inquietudes y sobre todo, los mismos orígenes. Las redes sociales son el altavoz necesario para que este proyecto siga poniendo en contacto a egabrenses de todos lugares, compartiendo experiencias propias con todos, haciéndolas nuestras hasta conformar nuestra historia como pueblo.
Desde Cabranoticias felicitamos a los promotores de la iniciativa por este trabajo sociológico en el que todos, sin necesidad de formación específica pueden sentirse autores de esta historia de Cabra en el Siglo XX. Enhorabuena.
Manuel Buil Baena
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