Agente del GEO y los GOES, junto con efectivos de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia, llevaron a cabo un gran despliegue policial en torno a la gallera situada en la localidad de Sangonera La Verde (Murcia)
Los agentes hallaron 103 gallos – seis de ellos muertos- e intervinieron unos 300.000 euros en efectivo destinados a apuestas ilegales, sustancias dopantes para aumentar la agresividad de los gallos y una plantación de marihuana
En el evento participaban los principales criadores de la península, equipando a los animales con espolones metálicos o suministrándoles drogas para incrementar su agresividad y resistencia
Agentes de la Policía Nacional han detenido a 182 personas como presuntos autores de un delito de maltrato animal cuando participaban en el Campeonato Nacional de Peleas de Gallos. Además, a tres de ellos se les ha imputado como presuntos autores de un delito contra la salud pública, usurpación de identidad y reclamación judicial.
Celebración del Campeonato Nacional de Pelea de Gallos
Por investigaciones realizadas por agentes de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia, se tenía conocimiento de los preparativos para la celebración del Campeonato Nacional de Pelea de Gallos en un paraje ubicado en la localidad murciana de Sangonera La Verde donde el propietario de una finca había establecido una gallera, recinto destinado a la pelea de gallos. En el evento participaban los principales criadores de esta especie en la península.
Operativo de intervención policial con la participación del GEO y GOES
Este pasado sábado, ante la previsión de la posible asistencia de unas 200 personas a este evento ilegal, se estableció un operativo de intervención policial con la participación del GEO (Grupo Especial de Operaciones), GOES (Grupos Operativos Especiales de Seguridad) de Valencia y Barcelona, Grupo de Medio Ambiente y Sección de Control de Juegos de Azar de la CGPJ (Comisaría General de Policía Judicial) más una elevada cantidad de efectivos policiales de la Jefatura Superior de Policía Nacional de la Región de Murcia.
A primeras horas de la tarde del día 12 de enero se puso en marcha el dispositivo en el que se detuvo a 182 personas. A todos ellos se les imputó un delito de maltrato animal, además a uno de ellos se le imputa un delito contra la salud pública, a otro un delito de usurpación de identidad por aportar la identidad de un hermano en el arresto y a un tercero se le detuvo también por una reclamación judicial.
Se ha intervenido gran cantidad de dinero en metálico, en torno a los 300.000 euros, así como numerosos documentos que acreditan las apuestas ilegales. También se halló un cultivo de 87 plantas de marihuana, al completo incautado así como sustancia dopante para animales y cuchillas y espolones utilizados en las peleas. Se han recuperado 97 gallos vivos así como otros 6 que ya se encontraban muertos.
Esta actuación ha implicado a su vez el levantamiento de 57 actas de seguridad ciudadana por la posesión de sustancia estupefaciente y el porte de armas blancas. Se han extendido también 8 actas por juego ilegal.
La Policía Nacional ha actuado con el apoyo de la Fiscalía Especial de Medio Ambiente, el refuerzo del Colegio de Abogados y la colaboración de Zoonosis.
Delito de maltrato animal agravado por las heridas o la muerte ocasionada
La celebración de peleas de gallos se incardina en el ilícito penal de maltrato animal, conducta además agravada por las heridas e incluso la muerte ocasionada a estas aves, siendo torneos en los que abundan las apuestas ilegales y se llevan a cabo a veces en presencia de menores.
El aspecto que presentan los animales utilizados en estos enfrentamientos deja en evidencia la crueldad de este tipo de actividades, en especial cuando se los equipa con espolones metálicos o se les suministran drogas para incrementar su agresividad y resistencia.
Ya en el año 2011, por parte de los mismos investigadores, se llevó a cabo una investigación en esta misma parcela donde se estaba celebrando otro campeonato llamado “pelea del millón”. Entonces se detuvo a los participantes, al propietario del recinto y a diversos aguadores, es decir, a los encargados de controlar la presencia policial en la zona. Se intervino un total de setenta mil euros, dinero destinado a apuestas ilegales y se incautó un arma de fuego corta, una pistola con su cartuchería.