Los servicios de emergencias 112 de Andalucía han gestionado más de 3.800 incidencias provocadas por los efectos del temporal que está arreciando desde hace una semana la comunidad autonómica. El portavoz del Gobierno andaluz, Juan Carlos Blanco, ha explicado que la mayoría de las llamadas al 112 ha estado motivadas por la caída de árboles y ramas, señales de tráfico, vallas publicitarias, antenas de televisión, toldos o chapas; y ha aclarado que la peor jornada fue el miércoles, 28 de febrero, cuando un trabajador falleció al caerle encima un árbol mientras realizaba labores de limpieza y retirada de árboles con riesgo de caída en el municipio de Hinojos (Huelva).
En cuanto a las provincias más afectadas, Sevilla ha sido donde más se ha dejado notar las jornadas de intensas lluvias y vientos, con un total de 1.513 incidentes, seguida de Cádiz con 517 avisos gestionados. Le siguen Málaga (463), Granada (379), Jaén (292), Huelva (280 avisos), Córdoba (241) y Almería (126).
El temporal también ha afectado a la red de carreteras secundarias, con presencia de balsas de agua, desprendimientos de barros y tierra, caídas de árboles y ramas y afectación por taludes. En la actualidad, permanece cortada al tráfico por desprendimiento la A-461 en el kilómetro 45, en el tramo comprendido entre Minas de Riotinto y Campofrío (Huelva). A este respecto, Juan Carlos Blanco ha aclarado que la Consejería de Fomento y Vivienda trabaja con urgencia en las obras de reparación para restablecer la circulación lo antes posible en esta vía autonómica.
Blanco ha apuntado que «aún se están evaluando los daños y nos encontramos en fase de recopilación de información, por lo que pedimos a los afectados que documenten con precisión las incidencias producidas».
EFECTOS PARA LA AGRICULTURA
Por otro lado, el portavoz del Gobierno andaluz ha puntualizado que «las lluvias han sido, en general, muy beneficiosas para la agricultura», puesto que «no se han producido daños graves en cultivos e infraestructuras y, en cambio, el agua va a suponer un alivio muy importante». Al respecto, ha subrayado que los efectos negativos más reseñables se han localizado en la comarca del Campo de Gibraltar en Cádiz, y en la provincia de Huelva, tanto en El Condado como en las playas.
En cambio, el agua caída, que está permitiendo recargar acuíferos, balsas y depósitos, ha llegado en un momento en el que se estaba entrando en una fase crítica, especialmente para los ganaderos, que en algunas zonas de Andalucía, como el Valle de Los Pedroches, se habían quedado sin recursos para abastecer a los animales.
Las precipitaciones también tendrán consecuencias positivas para los pastos, que para primavera serán de una calidad mucho mayor. Además, también serán beneficiosas para el olivar de la próxima campaña porque la actual está casi terminada; y para los cereales y todas las herbáceas de invierno, cultivos como los de trigo, cebada, avena o habas. Igualmente, las lluvias serán un alivio para los cultivos tropicales, viñedos y garbanzos, y una garantía para el girasol y el algodón.
Por otro lado, el portavoz también se ha referido al agua recogida en los embalses andaluces, aludiendo a que hasta el lunes, 5 de marzo, se habían embalsado más de 212 hectómetros cúbicos de agua, una cifra que según ha precisado Blanco «va a seguir creciendo estos días».
«Este dato va a permitir suavizar muchas de las medidas previstas en el Decreto de Sequía que ultima la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio y que se aprobará durante este mes en el Parlamento de Andalucía», ha añadido el portavoz de la Junta, quien ha pedido, no obstante, «prudencia», puesto que «llevamos cinco años en una situación de escasas precipitaciones y tendría que llover más para que pudiera hablarse de una situación normalizada».