La Diputación de Córdoba, a través del Instituto de Cooperación con la Hacienda Local, ha abonado ya a los ayuntamientos de la provincia la cantidad de 103,75 millones de euros en concepto de anticipos a cuenta de la recaudación prevista durante el ejercicio 2015.
Esta transferencia ha sido posible gracias a las aportaciones de la Diputación de Córdoba (15 millones de euros), del Instituto de Cooperación con la Hacienda Local (que aporta 8 millones) y a las operaciones de tesorería suscritas recientemente con varias entidades bancarias, en concreto con Banco Santander, Unicaja Banco, Caja Rural del Sur y CajaSur Banco.
El vicepresidente primero de la institución provincial, Salvador Fuentes, destaca que el objetivo de estas operaciones es “poder facilitar liquidez a los ayuntamientos en el inicio del ejercicio presupuestario sin necesidad de esperar a que se realicen los ingresos previstos por dicha recaudación”.
De los 103,75 millones transferidos, la institución provincial aporta con fondos propios 15 millones de euros y el Instituto de Cooperación con la Hacienda Local 8 millones. Por último, la cantidad restante proceden de operaciones de crédito suscritas por Diputación con el Banco Santander, Unicaja Banco, Caja Rural del Sur y CajaSur Banco.
Los contratos han sido suscritos por el vicepresidente primero de la Diputación, Salvador Fuentes; Alfredo Montilla y Alberto García por el Banco Santander, como director institucional territorial y jefe de Instituciones Córdoba respectivamente; por Unicaja José Antonio Sanchez Garrido, director de Cuentas del Sector Público; por Caja Rural del Sur José Luis Vega-Leal y Sergio Maestre, director territorial y director de la oficina principal de Córdoba; y por CajaSur Banco Rocío del Pino Lovera, directora de Banca de Empresas e Instituciones.
El vicepresidente insiste en que “esta liquidez llega al conjunto del sistema económico de la provincia y permite su revitalización. De esta forma, prosigue, “los ayuntamientos pueden cumplir con sus compromisos de pago a proveedores y ejecutar sus obligaciones presupuestarias sin necesidad de esperar a que se realicen los ingresos previstos por la recaudación tributaria”.
Fuentes concluye insistiendo en que “de este modo se hace posible que, desde la Diputación, se ofrezcan soluciones que facilitan al contribuyente el cumplimiento de sus obligaciones tributarias”.