La delegación territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales y la delegación territorial de Educación de la Junta de Andalucía han organizado una sesión de formación masiva con motivo del Día Europeo de la concienciación de la Parada Cardiaca, junto a la delegación municipal del Educación e Infancia y de Deportes del Ayuntamiento cordobés. Las jornadas, coordinadas por la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias 061 en Córdoba, se celebran por sexto año consecutivo, desde que en 2013 el Parlamento Europeo dedicara el 16 de octubre a la concienciación en esta materia en toda la Unión Europea.
Enmarcadas dentro de la campaña puesta en marcha por el Consejo Europeo de Resucitación (ERC) bajo el lema de este año «Todos los ciudadanos del mundo pueden salvar vidas», las jornadas han contado con la presencia de los delegados de Educación y de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Antonio J. López y María Ángeles Luna, respectivamente, que han estado acompañados por el director del EPES 061 en Córdoba, Antonio Mantero.
El Pabellón de Deportes Vista Alegre de la capital ha acogido de nuevo este evento al que se han unido en esta ocasión instituciones públicas de Córdoba, entre las que se encuentran el Servicio Andaluz de Salud, la Agencia Pública Alto Guadalquivir, la Universidad de Córdoba, Cruz Roja Española, la Brigada `Guzmán el Bueno´ X del Ejército de Tierra, la Policía Local y el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento del Ayuntamiento de Córdoba, el hospital San Juan de Dios de Córdoba y el Hospital Quirónsalud, las sociedades científicas SEMES, SEMERGEN, SAMFYCS, SAMIUC y las empresas Asistencia los Ángeles S.L., Ambulancias Paulino Gil Romero, S.L., Ambulancias Córdoba, S.A., Ambulancias Norte, S.L, Transportes Sanitarios del Sur de Córdoba, S.L. y la Fundación Mapfre.
Un total 1.600 alumnos de secundaria y primaria procedentes de diferentes institutos y colegios de la capital, se han dado cita hoy para participar en la celebración de este día, a través de estas jornadas de entrenamiento masivo en reanimación cardiopulmonar, dentro de la campaña denominada #cardioamaratón061, en la que 50 docentes, pertenecientes al 061 y a las instituciones colaboradoras forman, de manera voluntaria a todos estos jóvenes a lo largo de la mañana.
“Con la sexta edición de esta jornada de formación masiva, la Junta de Andalucía con la iniciativa de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias de la Consejería de Salud continúa incrementando el número de personas que conocen cómo actuar ante estas situaciones en nuestra capital, facilitando la puesta en marcha de la cadena de supervivencia en el menor tiempo posible ante una parada cardiaca”, según ha manifestado Luna. En este sentido, ha recordado que el Consejo Europeo de Resucitación ha calculado que más de 100.000 personas al año podrían salvar sus vidas en Europa si se alcanzaran las tasas de formación de ciudadanos en estas técnicas que hay en países referentes, como son los Países Bajos o Suecia.
La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias ha formado desde 2013 a 4.061 cordobeses, entre primeros intervinientes en las situaciones de emergencias y alumnos y profesionales de la comunidad educativa. Las recomendaciones internacionales indican que una de las estrategias para disminuir la mortalidad de los pacientes que han sufrido una parada cardiorrespiratoria es enseñar a la población en general las medidas básicas que deben aplicar a estos pacientes mientras llegan los equipos sanitarios, y que han demostrado que aumentan la supervivencia en estos casos.
La delegada también ha destacado “el apoyo de todas las instituciones públicas y privadas, que se dan cita todos los años para colaborar en esta iniciativa que persigue estimular a la población para educarse en estas técnicas de Resucitación Cardiopulmonar (RCP) y sensibilizar a la sociedad en general, y a todos sus agentes en particular, sobre la relevancia y repercusiones de la muerte súbita cardíaca. Una iniciativa que tiene objetivo la lucha contra las muertes evitables, súbitas y accidentales”.
Por su parte, el delegado de Educación, Antonio José López, ha destacado el apoyo que desde su delegación se da cada año a estas jornadas en las que en esta ocasión participan alumnado de una veintena de centros de la provincia y que “persiguen estimular a los más jóvenes para que se eduquen en técnicas de resucitación cardiopulmonar (RCP)”, a la vez que “sensibilizan a su entorno más cercano sobre la relevancia y repercusiones de estas técnicas, las cuales ayudan a evitar muertes por parada cardiorrespiratoria”.
En el año 2017, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias realizó soporte vital avanzado a 1.168 pacientes, el 73% de ellos hombres. La edad media fue de 62 años (61 para hombres y 64 para mujeres). Algo más de 6 de cada 10 paradas cardiacas sucedieron en el domicilio. En el 80% de los casos la parada cardiaca fue presenciada y si excluyendo los casos presenciados por personal sanitario, hubo reanimación previa en 330 pacientes, apoyando al testigo reanimador desde el centro coordinador con RCP asistida por teléfono, en dos tercios de los casos. Según los datos de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, el desfibrilador externo automático se utilizó previamente a la llegada del equipo de emergencias en 85 pacientes (3,5%).
Tras la asistencia in situ de los pacientes por el equipo de emergencias sanitarias 061, 350 pacientes (30%) llegaron con pulso al hospital y un 4,8% en situación de reanimación continuada. Se realizaron 14 activaciones de códigos de donación en asistolia. Un total de 146 pacientes (12%) recibieron el alta hospitalaria con buen estado neurológico.
RCP Telefónica
Desde los centros coordinadores de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, ante una situación de sospecha de parada cardiorrespiratoria, se anima y se explica a los alertantes como realizar estas maniobras básicas mientras que llegan los equipos de emergencias al lugar del suceso, dado que está demostrado que intentar aplicar estas técnicas a pesar de no tener conocimientos previos en primeros auxilios, ayuda a muchos pacientes llegando a aumentar las posibilidades de supervivencia en más del 50% de los afectados.
Estos eventos suceden en la calle, en el trabajo o mientras se hace ejercicio o una actividad extenuante, aunque ocurren en su mayoría en el hogar. En la actualidad, menos de 1 de cada 10 personas sobreviven. Las investigaciones realizadas muestran que la aplicación de las técnicas de reanimación cardiopulmonar por una persona que presencia la parada cardiaca aumenta la supervivencia entre 2 y 3 personas de cada 10, aunque sólo 1 de cada 5 pacientes llega a recibir esta ayuda.
En Andalucía, la Consejería de Salud ha implantado en los centros coordinadores de urgencias y emergencias del 061 un protocolo de atención telefónica ante una situación de sospecha de parada cardiaca, gracias al cual los testigos presenciales inician las maniobras básicas de reanimación cardiopulmonar mientras acuden los equipos de emergencias al lugar del suceso, siguiendo las instrucciones que se les facilitan desde la sala de coordinación de forma ininterrumpida hasta la llegada de los sanitarios. La RCP telefónica ayuda a personas que no tienen formación a realizar estas maniobras.
Técnica de reanimación cardiopulmonar
La parada cardiaca es la interrupción brusca, generalmente inesperada y potencialmente reversible de la circulación espontánea y la respiración espontáneas. Una recuperación del paciente sin secuelas neurológicas exige que los tiempos de actuación sean lo más precoces posibles. En este punto, la colaboración ciudadana, el aviso y el inicio inmediatos de maniobras de reanimación son imprescindibles para conseguir un buen resultado final.
La técnica de reanimación cardiopulmonar consiste en el mantenimiento de la vía aérea abierta, de la respiración y de la circulación de la sangre, sin equipo específico, sólo utilizando las manos y la boca, pudiéndose usar dispositivos de barrera para la vía aérea, evitando así el contacto directo con la víctima.
Cadena de supervivencia
Durante las sesiones formativas, los asistentes pondrán en práctica los consejos y recomendaciones de los profesionales sanitarios para realizar la reanimación cardiopulmonar sobre maniquíes o pacientes simulados, al tiempo que aprenderán la secuencia de actuaciones que determinan un aumento de la supervivencia tras sufrir una Parada Cardiaca (PCR), lo que se ha llamado la ‘Cadena de Supervivencia’.
Esta cadena consta de cuatro eslabones bien diferenciados y todos a su vez imprescindibles. En primer lugar, hay que alertar con rapidez al servicio de emergencias sanitarias llamando al número 061, para posteriormente comenzar con las maniobras de reanimación cardiopulmonar básica (RCP) de forma eficaz y hasta que llegue el equipo sanitario que atenderá al paciente. En tercer lugar, se efectuará la desfibrilación precoz, que se refiere al tratamiento eléctrico de la arritmia que ha producido la parada. Por último, el equipo de emergencias sanitarias realizará la asistencia y traslado al hospital correspondiente.
Hospital Universitario Reina Sofía
El Hospital Universitario Reina Sofía se ha sumado también a las actividades con motivo del Día Europeo de Concienciación de la Parada Cardiorrespiratoriza, organizada por la European Resuscitacion Coucil (ERC), que se celebran cada año el 16 de octubre. Concretamente, profesionales de la Unidad de Cuidados Intensivos han programado cuatro talleres abiertos a la ciudadanía con los que se pretende dotar la sociedad del conocimiento necesario para actuar ante una muerte súbita.
Los cuatro talleres se han impartido a lo largo de la mañana, en el vestíbulo principal del Hospital General, y consisten en formar a las personas sobre cómo actuar en caso de emergencias ya que, según explica el especialista en Medicina Intensiva, Juan Carlos Robles, “los primeros auxilios son la atención más inmediata que realizamos a una persona accidentada o enferma antes de ser atendida por profesionales expertos de los equipos de emergencias”. En este sentido, añade, “un correcto conocimiento de las actuaciones a llevar a cabo en ambos casos, nos permitirán ofrecer una respuesta rápida para proteger a las personas, minimizar el impacto del accidente y aumentar la supervivencia”.
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