La consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Elena Víboras, ha pedido colaboración a las administraciones, la ciudadanía y el sector privado para lograr el necesario “compromiso y esfuerzo por parte de todos” que permita a la Comunidad Autónoma andaluza mejorar sus capacidades en los próximos seis años. “Desde la Junta de Andalucía haremos todo lo posible para que los promotores y los emprendedores puedan contar con las políticas de apoyo necesarias”, ha afirmado.

Estas afirmaciones se incluyen en el discurso que Elena Víboras ha pronunciado hoy en Jaén durante su intervención en la mesa redonda ‘Liderando el proceso: De la convergencia a la competitividad. Retos para Andalucía’ incluida en las jornadas ‘La política de cohesión 2014-2020. Hacia Europa 2020 con la ayuda de los Fondos Estructurales y de Inversión’ organizadas por la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP). En este encuentro han colaborado también la Diputación Provincial de Jaén, el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y diversos organismos de la Junta de Andalucía.

La consejera ha recalcado que desde el ámbito local se pueden llevar a cabo numerosas actuaciones “para mejorar el progreso económico y el bienestar de los ciudadanos” y por este motivo es muy importante que los encargados de poner en marcha estas medidas conozcan bien los instrumentos que pone a su disposición la política de cohesión europea. De esta forma, ha añadido, podrán “realizar propuestas bien articuladas y con más posibilidades de conseguir financiación”.

La titular de Agricultura ha explicado a los asistentes que más del 90% del territorio andaluz se incluye en áreas rurales y éstas zonas reciben una especial atención dentro de la política de cohesión con el fin de mejorar sus niveles de desarrollo y aprovechar sus recursos endógenos. En cuanto a las tareas realizadas hasta la fecha en este marco, se ha referido a inversiones para mejorar la comunicación y acceso a las zonas rurales o proyectos científico-técnicos en el ámbito agrario y pesquero financiadas a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder); y a cursos de formación a agricultores o becas para personal científico costeados por el Fondo Social Europeo (FSE). Víboras ha recalcado que la política de cohesión se complementa además con el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) y el Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca (FEMP), “otros dos instrumentos de inversión que nos proporcionan las políticas agraria y pesquera”.

Gracias a la aplicación de todas estas políticas durante más de 25 años, hoy Andalucía “no sólo cuenta con una adecuada red de infraestructuras, sino también con un sector agroalimentario potente y unos pueblos llenos de vida”, ha recalcado la consejera, destacando que en esta región no ha desaparecido ningún pueblo, circunstancia que sí ha tenido lugar en otras Comunidades Autónomas.

Retos del sector andaluz

Durante su participación en la mesa redonda, Elena Víboras ha reconocido que “todavía tenemos muchos retos por delante” tanto en el sector agroalimentario como en los pueblos de la Comunidad Autónoma. En cuanto al primer ámbito, ha comentado que es imprescindible “seguir siendo competitivos en un mercado cada vez más globalizado” y para ello “debemos contar con unas explotaciones modernas y bien organizadas” gestionadas por “agricultores profesionales cada vez más involucrados en la transformación y la venta de sus productos”.

A esto ha añadido la importancia de que existan “cooperativas de mayor dimensión y capacidad, organizaciones de productores que tengan más peso en los mercados internacionales y puedan abordar las inversiones necesarias para innovar, mejorar la comercialización y la calidad” con el fin de lograr esta competitividad.

Al margen del agroalimentario, la consejera ha resaltado otros desafíos de futuro como mejorar la diversificación económica de los pueblos para que “se aprovechen mejor los recursos endógenos”, facilitar el acceso a las nuevas tecnologías y lograr un desarrollo “más sostenible”.

Apoyo público

Elena Víboras ha afirmado que el Feader es “el principal instrumento que tenemos a nuestra disposición” para lograr estas metas, si bien también ha recordado que Andalucía “contará con 258 millones de euros menos por un injusto reparto de este fondo europeo y una menor cofinanciación” por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Sin embargo, según sus propias palabras, la Junta de Andalucía ha hecho “un esfuerzo” para diseñar un Programa de Desarrollo Rural (PDR) “que permita dar un salto cualitativo hacia la competitividad”. “Destinaremos casi 900 millones de euros para lograr un sector agroalimentario más competitivo”, ha afirmado la consejera.

El PDR andaluz contempla, entre otras medidas, un Subprograma Temático del Olivar (más de 300 millones de euros), inversión destinada a infraestructuras agrarias (más de 190 millones de euros) y actuaciones de desarrollo territorial que llevarán a cabo los Grupos de Desarrollo Rural (GDR). Estas entidades contarán con un presupuesto total de 248 millones de euros para apoyar proyectos de emprendedores rurales y diseñar sus estrategias.

Esta planificación prevé medidas dirigidas a potenciar la modernización de explotaciones y el relevo generacional, ya que estas cuestiones son dos de las prioridades del Gobierno andaluz.

Además, el PDR apuesta por que “la innovación llegue al campo y a las empresas” a través de la aplicación de tecnologías que ya existen en otras áreas o países y pueden adaptarse con éxito al sector agroalimentario andaluz. Respecto a este último objetivo del PDR, la consejera ha hecho hincapié en que las entidades locales “pueden jugar un papel activo” en la creación de los grupos operativos de innovación que se fomentarán, ya que pueden colaborar en la puesta en contacto de productores “con una necesidad concreta” y socios tecnológicos e industriales “para desarrollar soluciones innovadoras”.