El Sindicato Profesional de la Enfermería, SATSE de Córdoba, ha denunciado ante 17 organismo e instituciones de la provincia, autonomía, nacional y europea “el riesgo inminente de pinchazo y sus posibles consecuencias de contaminación o contagio de posibles enfermedades que para el profesional de enfermería tiene el pinchazo involuntario y accidental con una aguja tras la aplicación de las vacunas de la gripe u otras a un paciente”.
De acuerdo con la nota de prensa que el SATSE nos han facilitado, durante la campaña de vacunación contra la gripe, los Enfermeros y Enfermeras de los centros sanitarios cordobeses administrarán mas 130.000 dosis de vacunas a otros tantos ciudadanos, por lo que ante la carencia de bioseguridad en las dosis de las vacunas nombradas, existe 130.000 posibles riesgos de un pinchazo accidental para los profesionales de Enfermería al haber una ausencia de las monodosis de dispositivo de seguridad.
En su comunicado de prensa el SATSE ha querido resaltar el significado del concepto Bioseguridad, un concepto que engloba una serie de medidas orientadas a disminuir el riesgo del trabajador, de la salud, y de adquirir infecciones en el medio laboral. El primer principio de la bioseguridad es la contención, término que incluye la sustitución, siempre que se pueda, del instrumental cortopunzante por otro material carente de agujas. Esta definición viene recogida en la Guía de bioseguridad para los profesionales sanitarios realizada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en el año 2015.
Según el sindicato de Enfermería , en los centros sanitarios de la provincia de Córdoba “se está vulnerando todos los requisitos, exigencias y medidas para proteger la seguridad del personal sanitario que se encarga de administrar las vacunas”. Ante esta situación el sindicato ha anunciado que va poner la situación en conocimiento de las Inspecciones de Trabajos y Servicios y Riesgos Laborales. A nivel de Estado ha denunciado la situación ante la Comisión Nacional de Bioseguridad y el Ministerio de Sanidad. Otra vía que han optado ha sido la de dirigirse a la OMS, la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo, el Defensor del Pueblo Europeo, la Agencia ejecutiva de Consumidores y el Centro Europeo para la prevención y el control de enfermedades, entre otros.
A través de estas denuncias el sindicato confía que “den su fruto y ataje radicalmente el riesgo que para la Salud de los profesionales de enfermería conlleva la administración de la vacuna de la gripe y otras sin los mecanismos y dispositivos de bioseguridad que las mismas han de llevar para evitar accidentes a los enfermeros y enfermeras en su trabajo diario”.