Los profesionales del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba han atendido en el primer semestre de este año 1.722 nacimientos, una cifra que supone un ligero descenso respecto al mismo periodo del pasado año, cuando se contabilizaron 1.790 alumbramientos, es decir 68 más.
La media de nacimientos registrados en la primera mitad de 2014 ha sido de nueve diarios y del total de ellos 29 han sido gemelares. Por otra parte, de entre los bebés nacidos de enero a junio de este año, 929 han sido varones (53%) y 822 niñas (47%).
Las mujeres que han decidido utilizar la anestesia epidural en los seis primeros meses de 2014 en el complejo sanitario cordobés han sido 1.219, correspondiente al 70,78% de los partos atendidos (hay que tener en cuenta que las cesáreas programadas no llevan epidural). La mayoría de los partos se han iniciado de manera espontánea (en el 70% de los casos), mientras que 454 han sido inducidos y se han realizado en estos seis primeros meses 63 cesáreas programadas.
Humanización al parto
Las mujeres han podido elegir el modo en que desea recibir este tipo de atención sanitaria, que figura entre las medidas incluidas en el Plan de parto y Nacimiento de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía ofrecida por el Hospital Reina Sofía, pues permite que las gestantes expresen por escrito cómo quieren hacerlo para que el alumbramiento se produzca en un entorno más favorable para la mujer y el bebé.
Del mismo modo, se promueve que el parto sea de baja intervención, es decir, que los profesionales permiten que éste evolucione de forma natural, minimizando el empleo de tecnologías o medicación que rompen su curso normal. Dicho plan pretende una participación activa de la mujer en la toma de decisiones que atañen a este momento tan especial, incrementando el protagonismo de ésta durante su propio parto.
Asimismo, también se potencia el vínculo entre madre e hijo, fomentando el contacto permanente de ambos desde el mismo momento del nacimiento. Para ello se aplican medidas como el contacto piel con piel en todos los partos normales, o el método canguro en niños de bajo peso que requieren ingreso. El hospital también cuenta con un hotel de madres consistente en un espacio especialmente dotado que usan las mujeres dadas de alta con hijos ingresados, evitando su separación y garantizando así la continuidad de la lactancia.