Varios miembros de la Junta de Gobierno de la Archicofradía
y devotos se han desplazado al Vaticano donde han sido recibidos por el Sumo
Pontífice. Como cada miércoles cuando tiene lugar la Bendición Papal de
carácter público en la Plaza de San Pedro, y entre numerosos fieles del
Papa, los dirigentes de la
Archicofradía pudieron acercarse
personalmente al Papa Francisco y al arzobispo secretario de la Congregación
para el Clero, Celso Morga, quien recogió los presentes que la Archicofradía
regalaba al Papa, así como de un donativo económico que tendrá fines sociales.
Con la representación máxima de la Archicofradía, Antonio Cano, los egabrenses
también han regalado al Papa una miniatura en plata de la Virgen, así como una
medalla que se colgó del cuello mientras saludaba a los egabrenses allí
congregados.
Por su parte, ha sido entregado a los devotos una medalla
esmaltada con la efigie del Papa que pasará a formar parte del ajuar de María
Santísima de la Sierra.